Los interiores boho chic de esta casa me han fascinado cuando los vi, es una vivienda repleta de bonitos detalles e ideas decorativas inspiradas en este encantador estilo que es tendencia. Su propietaria es una diseñadora de interiores de origen sueco, la estilista Leonor Juhl Kristiansson, quien ha plasmado en cada rincón conocimientos profesionales sin dejar de lado el guiño personal que transmite vida a los ambientes.
Lo que más me gusta de esta casa es que cuenta con un espíritu alegre, los espacios son vividos, invitan al relax y a disfrutar de la vida cotidiana combinando belleza de lo simple con estilo.
En la decoración del hogar es donde mejor podemos ponernos a jugar con ideas, creatividad y apostar a lo que nos apetece, las formas, los colores, las texturas, se mezclan hasta dar con el resultado que esperamos. Allí, en ese lugar íntimo, nuestra casa, podemos dar rienda suelta a la imaginación y comenzar a crear atmósferas que nos resulten agradables.
Esta antigua casa se convirtió en el laboratorio donde la diseñadora moldeo cada espacio hasta darle la forma que se adecuo a su familia y al ritmo de vida actual. La casa de madera se encuentra rodeada por un entorno natural fabuloso, tentador, que invita a mirar hacia afuera mientras se disfruta de la calidez del interior.
Destaca el estilo bohemian chic, y en cada habitación surgen esas notas de color que revitalizan la decoración, empapada por detalles que con sencillez añaden una impronta casual y fresca.
La casa es un lienzo en blanco donde las pinceladas de color de muebles y accesorios definen cada ambiente, le dan carácter y alegran la atmósfera.
Entre las estancias que mas me agradan, está el comedor, y lo escojo por sus vistas a un exterior donde el verde de la naturaleza es protagonista. La mesa blanca se integra con las paredes y la carpintería, mientras un juego de sillas desparejadas añaden dinamismo. Plantas suman el guiño fresco y los textiles se encargan de la calidez, que con texturas y coloridos personalizan este ambiente. Una luminaria colgante, puede ser complemento perfecto para también agregar tonalidades alegres.
Una lámpara de mesa sobre la encimera es un guiño inesperado que aporta practicidad a un área de trabajo. Mientras que la sencillez de una tabla de madera colgada en la pared, con clavos que sujetan unas tazas con diseños que combinan blanco y turquesa, define una atmósfera relajada y casual.
La cocina y el comedor se distribuyen en una planta abierta, un espacio diáfano que se convierte en un área versátil que permite la fluidez visual, y una mejor comunicación entre diferentes zonas. El pavimento de madera que recorre casi toda la casa, ademas de la calidez y elegancia que ofrece, resultan un elemento que unifica el espacio, y permite una sensación de limpieza y orden.
La descontextualización de objetos, la apertura a nuevos conceptos para elementos que vemos con una única función está presente en esta vivienda. Se puede adivinar en el salón, donde una mesa de centro se convierte en un mueble original gracias a que se creó a partir de una vieja puerta o ventana de madera, agregando unas ruedas, que la transforman en una pieza móvil y súper práctica.
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Fotos Decoracion: houseofturquoise