El reciclaje de muebles y complementos decorativos, desde ya hace unos años es una tendencia que llegó para quedarse, y beneficiarnos en la decoración de nuestras casas, de formas diversas. A través del reciclaje de piezas, conseguimos, en ocasiones, un importante ahorro, y por otra parte, reciclar nos permite poner en juego la creatividad, dando un nuevo aspecto a elementos en desuso.
Recuperar piezas como mesas, relojes antiguos, o lámparas, es posible, la tarea comienza en buscar esas objetos que nos interesan, en mercadillos, almonedas o mercados de pulgas, o bien, rescatándolos de desvanes.
Luego habrá que formar una idea del resultado final, en cuanto a la estética nueva que vamos a dar al elemento elegido. Algunas piezas necesitan restauración, y otras, sólo un poco de lija y unas capas de pintura.
De esta forma, es posible dar un nuevo uso, y utilidad a diferentes objetos que creemos ya como perdidos, o que no pueden cumplir ningún tipo de función en nuestros hogares.
Este concepto de ‘recuperar’, es el que se ha aplicado al momento de crear una mesa original y rústica a partir de una vieja puerta.
Parece que la historia de esta mesa, parte de una puerta que salió casi ilesa del incendio del granero, así es como se ha convertido en parte fundamental de una mesa de centro en una zona de estar.
Para diseñar esta nueva y rústica mesa, se tomó una puerta vieja de madera, que pasó a cumplir el papel del sobre de la mesa, completando la pieza con unos caballetes, también de madera.
El resultado es encantador, pues se ha conseguido una mesa original, como parte integrante de un salón, al que aporta un guiño original a este ambiente.
A partir del reciclaje se pueden obtener efectos únicos e innovadores sobre piezas que siguen mostrándonos la impronta del tiempo, algo que sin dudas, es parte de la belleza de las piezas antiguas o recuperadas.
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Fotos Decoracion: x4duros