En el diseño de un jardín japonés, o con estilo Zen se representa el paisaje mismo de Japón, con un predominio de piedras, lomadas en el terreno y el agua, que suele rodear al jardín. El uso de los elementos que conforman este tipo de jardín es mesurado, pues se busca la armonía y el equilibrio de unos con otros, cuidando las ubicaciones y las escalas.
Veamos algunas de las características que distingue a este tipo de jardines.
- El diseño de estos jardines está basado en la cultura oriental, razón por la cual cada idea y cada elemento tienen un sentido, y un significado.
- Se busca la asimetría en las formas, pues esto refleja naturalidad. Es por ello que las plantas o las piedras se reúnen en grupos impares de 3, 5 o 7 por ejemplo, y el significado de esto es que como se trata de números indivisibles o primos, transmiten una sensación de unión y fortaleza.
- Las prioridades para el diseño son las formas y el brillo, evitando el uso de colores fuertes. Esto se relaciona con los principios simples y austeros de la cultura japonesa, de tipo minimalista.
- Para construir un jardín de este estilo, se puede partir de un espacio desde 2 x 2 metros de superficie como mínimo.
- El uso típico de las rocas y piedras, se aprovecha para delimitar senderos, caminos u otros espacios. También se las emplea para formar un dibujo o un motivo.
- Se suelen usar cañas o mimbre para formar cercos, o cañas de bambú con la que se hacen soportes o se usan como fondo del resto del jardín.
- Otro objeto característico son los faroles o linternas de piedra, de aspecto atractivo y usados para ofrecer una suave iluminación que resalte algún elemento en el espacio.
- En cuanto a las plantas que pueden utilizarse son muchas, algunos ejemplos son los helechos, camelia japónica, hortensia, azaleas, soleirola y cualquier tipo de confiera.
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Vía: decoraestilo
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