Un bonito espacio de trabajo pequeño y luminoso dentro de la casa, junto a una ventana, puede hacer la diferencia en un ambiente, y el agradable aspecto de la estancia ayudarnos a la concentración y a la eficiencia en las horas dedicadas a una tarea específica.
Una ubicación perfecta para poder aprovechar al máximo la luz natural que entra al interior de una habitación por una ventana, es el escritorio enfrentado a la misma, que además permite apreciar el exterior en momentos que necesitamos relajarnos.
Una mesa y una silla de madera forman el conjunto de mobiliario de esta pequeña oficina o espacio de trabajo o de estudio dentro de la cocina.
Los detalles florales aportan calidez a la decoración, están presentes en la tapicería que se utilizó para el asiento de la silla, en un jarrón con flores naturales, que además son un fresco guiño que inunda de color y encanto el ambiente.
Simples bandejas que sirven para organizar y ordenar objetos sobre el escritorio o mesa de trabajo, y lo mejor de esta ambientación es una idea de decoración que nos muestra cómo se logra que este diminuto ambiente de trabajo se integre con la cocina, sin invadir la armonía del interior.
Es una solución para quienes necesitan de un lugar específico dentro de sus casas para trabajar, y no cuentan con mucho espacio. En este interior ha sido aprovechado de un modo magistral el espacio que se encuentra entre la puerta de ingreso a la casa y la cocina, y consiguiendo como resultado una decoración personal y una sensación visual ordenada y agradable.
Unas plantas que cuelgan frente a la ventana crean un entorno natural que ayuda a integrar este espacio de trabajo al resto de la casa. Esta propuesta nos da la pauta que podemos componer un ambiente de trabajo en espacios pequeños, con muy pocos recursos, y en cualquier rincón bien aprovechado de una estancia.
Fotos Decoracion: http://nicety.livejournal.com/1162175.html